El dólar estadounidense se mantiene un tanto en modo de avance durante la jornada, alcanzando niveles no vistos desde el año pasado, con el índice del USD (DXY) encontrando resistencia en el nivel de los 107 puntos. Los recientes datos económicos en Estados Unidos fueron de apoyo inicialmente, aunque parte de los movimientos tras los resultados positivos presentados el jueves han sido mitigados.
Por un lado, las nuevas métricas de inflación mostraron avances. Tras el aumento del índice de precios al consumidor (CPI) del día de ayer, los precios al productor (PPI) también subieron en octubre, con un alza mensual del 0.2% y un incremento interanual del 2.4%, superando las expectativas del mercado. En cuanto al PPI subyacente, excluyendo alimentos y energía, los precios aumentaron un 0.3% mensual y un 3.1% interanual, lo que representa la mayor aceleración en cuatro meses.
Además, las solicitudes iniciales de desempleo se ubicaron en su nivel más bajo desde mayo, alcanzando las 217,000 solicitudes. Este dato llega para entregar una relativa calma en cuanto a las posibles incertidumbres existentes con relación al mercado laboral luego de los datos de octubre del NFP, impactados por la volatilidad derivada de huelgas y tormentas. Estos datos, en conjunto, refuerzan la idea de que la Reserva Federal pudiera no requerir recortar tasas de manera substancial el próximo año, ya que la economía parece seguir mostrando resiliencia y existen señales relativas de una moderación en el progreso desinflacionario.
Adicionalmente, existen ciertas incertidumbres, particularmente en relación con las políticas del próximo gobierno. Las propuestas de mayores restricciones en inmigración y comercio podrían incrementar las presiones inflacionarias, lo cual ha ayudado adicionalmente a los avances del dólar estadounidense.
En resumen, los recientes avances del USD están sustentados tanto por la fortaleza de los datos económicos como por la expectativa de un entorno político que podría aumentar las presiones inflacionarias en el mediano / largo plazo. Esto ha llevado al índice DXY a niveles no vistos desde el año pasado, todo esto mientras los mercados evalúan las posibles decisiones futuras de la Fed y el impacto de la nueva administración.

