La ciudad de Pasto se enfrenta a una realidad preocupante en cuanto a infraestructura educativa, especialmente en el sector de El Calvario y el Corazón de Jesús, donde operaba la escuela «Hermógenes Zarama», un centro educativo que en su mejor momento atendía a más de 300 niños de la comunidad.
Sin embargo, tras años de desinterés por parte de las anteriores administraciones municipales y las juntas comunales, la escuela ha sido desmantelada y se encuentra en un estado de total abandono.
El reciente recorrido por las instalaciones de la escuela fue realizado por el alcalde de Pasto, Nicolás Toro, quien manifestó su preocupación al encontrarse con un panorama desolador. Según el burgomaestre, el lugar ha sido víctima de la falta de inversión y mantenimiento, lo que ha generado una crisis en la oferta educativa de la zona.
«Es lamentable ver cómo una escuela que fue un referente educativo en la comunidad se ha ido deteriorando con el tiempo, y lo más triste es que cientos de niños y jóvenes han perdido la oportunidad de estudiar en un espacio adecuado», señaló Nicolás Toro durante su visita.
Infraestructura
En su intervención, el alcalde se comprometió a tomar cartas en el asunto y trabajar en un plan de recuperación de la infraestructura de la escuela «Hermógenes Zarama». «No podemos permitir que esta escuela siga en el olvido. Es nuestra responsabilidad garantizar que los niños del sector cuenten con un lugar digno donde puedan recibir educación de calidad», añadió Toro, quien aseguró que los recursos para su restauración ya están siendo gestionados.
El compromiso del alcalde busca devolverle a la comunidad educativa de Pasto un espacio vital para el desarrollo de los niños y jóvenes de las zonas más vulnerables. Las autoridades municipales trabajan para priorizar las obras de rehabilitación, con el fin de que en un futuro cercano la escuela pueda reabrir sus puertas y seguir formando generaciones de estudiantes.
El llamado de Toro es también una invitación a las autoridades anteriores y a la sociedad en general para que se unan a este esfuerzo, en pro de garantizar que la educación en Pasto sea accesible y de calidad para todos los niños y niñas, sin importar su contexto social o geográfico.