Este viernes, desde Washington D.C., altos funcionarios de la Casa Blanca proporcionaron detalles sobre la controversia generada por la presunta financiación estadounidense para la compra del software de espionaje Pegasus. Los oficiales confirmaron que, una vez que el presidente Gustavo Petro denunció públicamente el asunto, se comunicaron de inmediato con el Gobierno colombiano para aclarar la situación antes de hacer declaraciones a la prensa.
Esta reacción se produce en un contexto de preocupación generalizada sobre el uso del software Pegasus, el cual ha sido señalado por su potencial para vulnerar la privacidad de individuos y organizaciones. La relación entre ambos gobiernos atraviesa un momento delicado, y el manejo de esta controversia añade tensión a una agenda bilateral ya compleja. Los detalles sobre la naturaleza de la financiación, así como el propósito de la adquisición, aún no han sido completamente revelados, y se espera que las autoridades de ambos países continúen abordando este asunto en conversaciones diplomáticas.

