Hay preocupación en el departamento del Cauca, después de que se conociera que en la mañana de ayer que el alcalde del municipio de Totoró, Jorge Luis Pizo, y su equipo de seguridad fueron víctimas de un secuestro exprés.
Según se conoció, hombres sin identificar interceptaron el vehículo en el que se movilizaba el mandatario local y lo plagiaron por un lapso de seis horas, antes de dejarlo en libertad. Sin embargo, los desconocidos se robaron el vehículo que está adscrito a la Unidad Nacional de Protección (UNP), además de quedarse con las armas que estaban en custodia de los escoltas de Pizo.
Hasta ahora, las autoridades no han entregado mayor información de lo ocurrido y, según se sabe, el mandatario local y su equipo se encuentran con buen estado de salud. De manera preliminar se conoció que el ataque se dio en el sector conocido como Boquerón, a unos 20 minutos del casco urbano de Totoró.
Tensa situación
Entretanto, el mandatario local hizo saber que la tensa situación de seguridad que mantiene lo han llevado a enviar un ultimátum al Gobierno nacional, exigiendo mayores garantías para el ejercicio de sus funciones o, por el contrario, presentará su renuncia como alcalde del municipio.
Sin embargo, el gobernador del departamento de Cauca, Octavio Guzmán, fue uno de los primeros en rechazar el ataque contra el mandatario, asegurando que, al igual que Pizo, hay 41 alcaldes más en la región con fuertes amenazas a su seguridad.
“Como Gobernador del Cauca expreso mi total solidaridad con el Alcalde de Totoró, Jorge Luis Piso, quien fue víctima de una retención inaceptable por parte de grupos armados, despojado de su vehículo y de la protección de su esquema de seguridad”, señaló el gobernador.
Asimismo, Guzmán envió una dura crítica a la UNP por la falta de rigurosidad en las medidas implementadas por la entidad para velar por la seguridad de los políticos en regiones de alto impacto, como en el caso de Cauca.