El municipio de Potosí fue escenario del Simulacro Nacional de Respuesta a Emergencias, un ejercicio fundamental que busca preparar a la comunidad ante situaciones críticas, como un fuerte sismo.
Con la participación de instituciones educativas, empresas públicas y privadas, y organizaciones sociales, la actividad tuvo como meta principal mejorar la coordinación entre todos los actores involucrados en la gestión de emergencias.
El escenario simulado en Potosí consistió en un fuerte temblor, un fenómeno natural que, según expertos, podría ocurrir en cualquier momento. Durante el simulacro, se activaron alarmas y se llevaron a cabo ejercicios de rescate, promoviendo la importancia de la preparación y la calma en situaciones de crisis.
Las autoridades locales instaron a los participantes a seguir las instrucciones y a actuar de manera organizada, evitando el pánico.
Autoprotección
Los objetivos del simulacro fueron claros: preparar y responder ante emergencias, así como generar conciencia y autoprotección para enfrentar fenómenos naturales. A través de la educación y la práctica, se pretende que la población esté más consciente de los riesgos y de cómo protegerse en situaciones adversas.
El ejercicio involucró no solo a las instituciones educativas, sino también a empresas de la región y a organizaciones sociales, creando un ambiente de colaboración y apoyo mutuo. La comunidad en general también tuvo un rol activo, participando en simulaciones de rescate y en la atención de heridos ficticios.
Jairo Paz, docente de la Institución Educativa Agropecuaria Luis Antonio Montero, destacó la relevancia de este tipo de ejercicios, afirmando que “la preparación es clave para enfrentar emergencias. No solo se trata de saber qué hacer, sino de hacerlo en un contexto realista, donde la presión y el miedo pueden jugar un papel importante”.
Importancia
Un funcionario de la Institución Educativa Germán Benavides también compartió su opinión, enfatizando que “es vital que todos entendamos que un desastre puede ocurrir en cualquier momento. Este simulacro nos ayuda a reconocer la importancia de la organización y la colaboración entre todos los sectores de la comunidad”.
Durante el simulacro, se hizo énfasis en qué hacer ante una emergencia: seguir las instrucciones de las autoridades locales, participar activamente en los ejercicios de rescate y, sobre todo, mantener la calma. La comunicación efectiva y la empatía fueron elementos clave, recordando a todos los asistentes que la cooperación es fundamental en momentos críticos.
La jornada culminó con una evaluación del ejercicio, donde se discutieron los puntos a mejorar y se compartieron aprendizajes. Este tipo de iniciativas no solo fortalecen la capacidad de respuesta ante emergencias, sino que también generan un sentido de comunidad y solidaridad, esenciales para enfrentar los retos que puedan surgir en el futuro.