La Fiscalía General de la Nación solicitó a un juez con control de garantías que enviara a prisión a Jhoser Stiven Franco Camacho y Delkin Niño Daza, quienes presuntamente estarían involucrados en el atentado contra la base militar de Puerto Jordán, en Arauca. Ambos fueron capturados por el Ejército poco después del ataque que dejó tres militares muertos y 33 heridos.
Según el informe de la Fiscalía, los dos hombres fueron detenidos minutos después del atentado, al encontrarse cerca de la volqueta utilizada por el ELN para perpetrar el ataque. Un soldado que reaccionó rápidamente los encontró saliendo del vehículo y los puso bajo custodia.
El testimonio del soldado, considerado clave por la Fiscalía, señala que estas dos personas eran las únicas que se encontraban cerca del vehículo en el momento en que los cilindros fueron disparados desde la volqueta, acompañados de ráfagas de disparos. Otros testigos afirmaron que durante el ataque se vieron motos y personas disparando en la zona, lo que lleva a pensar que los detenidos, quienes se movilizaban en motocicleta, podrían haber participado en el atentado.
Además, entre las pruebas presentadas por la Fiscalía se encuentra la motocicleta en la que los sospechosos se desplazaban, hallada en el «lugar exacto de los hechos». Sin embargo, ninguno de los dos fue encontrado en posesión de armas de fuego.
Una fuente cercana a la investigación indicó a El Espectador que Delkin Niño Daza, identificado como el hombre que vestía una camisa roja, sería el «explosivista», es decir, quien habría preparado los cilindros de gas cargados con explosivos usados en el ataque. No obstante, todo sigue bajo investigación.