El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, afirmó este lunes su compromiso de «defender la democracia en todo el mundo, incluyendo Venezuela», y exigió al gobierno de Nicolás Maduro la publicación de las actas electorales para garantizar una verificación «imparcial e independiente» de los resultados.
Durante una reunión con diputados, senadores y europarlamentarios de su partido (PSOE) en el Congreso, Sánchez mencionó a Venezuela como parte de sus prioridades en el actual ciclo político, aunque no se refirió de manera específica a la crisis diplomática entre España y ese país.
En su intervención, Sánchez subrayó la necesidad de defender la democracia globalmente, y reiteró su exigencia al gobierno venezolano para que publique las actas de las recientes elecciones y permita una verificación objetiva. Según el mandatario, esta petición ha sido respaldada por «la mayoría de los países occidentales y los miembros de la Unión Europea» desde hace más de un mes.
Sánchez también criticó a quienes usan la política exterior «para atacar al Gobierno de España o dividir a los ciudadanos», en una referencia implícita al Partido Popular (PP), principal partido de la oposición. Acusó al PP de «apoyar irresponsablemente campañas de desinformación y desestabilización impulsadas por actores externos.»
La semana pasada, el PP impulsó y logró que el Congreso aprobara una proposición no de ley para declarar a Edmundo González, candidato opositor, como presidente electo de Venezuela tras las elecciones presidenciales del 28 de julio. Sin embargo, esta posición no es compartida por el Gobierno de Sánchez ni por otros miembros de la UE, que continúan exigiendo la publicación de las actas electorales para determinar con certeza el verdadero ganador.
El Consejo Electoral Nacional de Venezuela declaró ganador a Maduro, pero la oposición afirma que Edmundo García Urrutia fue el verdadero vencedor y ha publicado un porcentaje significativo de actas para respaldar esta afirmación.
González, tras ser citado por la Fiscalía venezolana, llegó a España el 8 de este mes para solicitar asilo político.