Con gran expectativa el pueblo venezolano esperaba los resultados de una elección presidencial forzada y llena de varios vicios, en los que incluso muchos veedores internacionales fueron vetados para participar de la misma; ya la comunidad internacional ve con preocupación los resultados emitidos que no generan transparencia y mucho menos confianza en lo que realmente querían los ciudadanos venezolanos, generando una sensación de fraude en el proceso.
Sin entrar a generar posiciones políticas lo que quiere cualquier ciudadano en cualquier estado es que se gobierne bien en beneficio del colectivo ciudadano y se respeten los derechos que le asisten en su propia patria.
Ya son más de 25 años en donde los países vecinos como Colombia, Ecuador, Perú, Chile, se han vuelto receptores de las migraciones de familias completas para buscar un mejor devenir; sin desconocer que en casi todo el mundo se ha dado este éxodo; en nuestra querida Colombia ya vemos como muchos venezolanos han sentado bases y han encontrado oportunidades laborales que le ha permitido sacar adelante sus familias. Cuando uno pregunta la razón de haber dejado su país, simplemente muchos manifiestas que no encuentran las condiciones para vivir en su patria; simplemente se perdió la “LIBERTAD” en todo el sentido de la palabra; no se puede opinar, debatir porque se tilda a cualquiera de opositor a un régimen que ya lo esta demostrando es una “DICTADURA”.
Este es el pronunciamiento oficial que emite la OEA Organización de Estados Americanos el 30 de julio de 2024: “Informe del Departamento para la Cooperación y Observación Electoral (DECO) de la Secretaría para el Fortalecimiento de la Democracia de la OEA sobre la elección presidencial de Venezuela para el Secretario General Luis Almagro. El Departamento para la Cooperación y Observación Electoral (DECO) de la Secretaría para el Fortalecimiento de la Democracia (SFD) de la Organización de los Estados Americanos (OEA) considera que, en las circunstancias actuales, no pueden reconocerse los resultados anunciados por el Consejo Nacional Electoral (CNE) que proclaman ganador a Nicolás Maduro en la elección presidencial del domingo 28 de julio en la República Bolivariana de Venezuela.
Más de seis horas después del cierre de la votación, el CNE realizó un único anuncio en conferencia de prensa, indicando que había procesado el 80% de las mesas de votación y declarando ganador al candidato oficialista, sin otorgar el detalle de las mesas procesadas, sin publicar las actas y brindando únicamente los porcentajes agregados de votación que habrían recibido las principales fuerzas políticas. El CNE falsamente calificó estos datos como “irreversibles”. Las cifras publicadas en el canal oficial revelaron, además, errores aritméticos.
Así que será el mundo, el tiempo y las circunstancias que den la razón a una salida para que Venezuela vuelva nuevamente a la democracia.
Por: Javier Recalde Martínez.
javierecalde.jrm@gmail.com