En un esfuerzo conjunto por preservar y proteger el medio ambiente, la Seccional de Carabineros y Protección Ambiental, los auxiliares de Policía del Cuarto Distrito de Policía de la Sandoná, y la Secretaría de Agricultura y Medio Ambiente de la Administración municipal se unieron para llevar a cabo una campaña en conmemoración de la Semana de Protección al Medio Ambiente, bajo el lema Yo Cuido Mi Planeta.
El objetivo central de esta campaña fue sensibilizar a la ciudadanía sobre la trascendental importancia del cuidado ambiental, al tiempo que se promovía la adopción de prácticas responsables por parte de los turistas que visitan estos hermosos paisajes naturales.
Necesidad
Uno de los principales aspectos destacados fue la necesidad imperante de garantizar una disposición adecuada de los residuos generados durante estas visitas, evitando así su abandono en el entorno natural.
En este contexto, se resaltó la relevancia del reciclaje y el manejo adecuado de los residuos como medidas fundamentales para mitigar el impacto negativo en el medio ambiente.
La concienciación sobre la importancia de estas acciones se convirtió en el eje central de la campaña, buscando motivar a la comunidad a asumir un compromiso activo en la preservación de los recursos naturales.
Como resultado palpable de esta iniciativa, se logró recolectar un total de 30 kilogramos de residuos sólidos, mayormente compuestos por plásticos y botellas que, de no ser correctamente gestionados, podrían representar una grave amenaza para la biodiversidad local y la calidad del agua del río Ingenio.
Restauración
Además, como una acción concreta hacia la restauración ambiental, se llevó a cabo la siembra de 100 árboles de especies nativas en las cercanías del río, contribuyendo así a la conservación del ecosistema ribereño.
La participación activa de la comunidad, las instituciones locales y las fuerzas del orden en esta campaña demuestra el compromiso compartido por proteger y preservar el medio ambiente en Sandoná.
Este tipo de iniciativas no solo generan un impacto positivo a corto plazo, sino que también sientan las bases para una cultura de respeto hacia la naturaleza y una convivencia armónica entre el ser humano y su entorno.
Es imperativo que todos los ciudadanos se sumen a esta causa, adoptando prácticas sostenibles en su vida cotidiana y siendo agentes activos de cambio en la construcción de un futuro más verde y equitativo para las generaciones venideras.