En el sector de Paraná, la preocupación de los vecinos se centra en un problema creciente que afecta la seguridad y la paz comunitaria. Este sector se ha convertido en el epicentro de una serie de situaciones alarmantes, donde jóvenes se reúnen para consumir sustancias alucinógenas y alcohol, generando no solo un ambiente insalubre sino también conflictos que escapan del control policial, especialmente durante las noches.
A pesar de los esfuerzos de la policía local por realizar rondas de vigilancia en la zona, la inseguridad persiste y se intensifica, dejando a los vecinos en un estado de constante preocupación. Johan Botina, un residente del sector, ha decidido levantar la voz y denunciar públicamente esta problemática, instando a las autoridades a tomar medidas efectivas para frenar esta situación.
Intervención urgente
«Es desesperante ver cómo la inseguridad se apodera de nuestro querido Paraná, especialmente en las noches. Los jóvenes se congregan en este lugar, consumen sustancias y alcohol, y eso desencadena peleas y situaciones violentas. Necesitamos la intervención urgente de las autoridades para devolver la tranquilidad a nuestra comunidad», expresó Botina. Los vecinos se unen en un llamado conjunto a las autoridades locales, solicitando una mayor presencia policial, estrategias de prevención y acciones concretas para abordar la raíz del problema. La seguridad comunitaria se vuelve una prioridad en Paraná, y la colaboración entre residentes y autoridades se presenta como clave para restaurar la armonía en el sector.