El debut de Jonathan René Rosero Tovar como técnico en propiedad del Deportivo Pasto es positivo. Me sorprende el desempeño que ha tenido el hombre nacido en Barbacoas, ya que a partir de que se retiró como jugador, nunca antes orientó ni siquiera por encargo un partido oficial en el ámbito profesional.
Lo que si nos damos cuenta que su productiva experiencia como jugador al lado de tremendos entrenadores y el estar como asistente de Flabio Torres, así como de Jersson González, le ha servido a René para crecer en este difícil campo de entrenador.
Rosero Tovar orientó hasta ahora cuatro juegos. El primero en la caída de visitante 1-0 ante Independiente Medellín. El desempeño futbolístico fue bueno y solo un error individual dio al traste con lo que pudo ser un primer resultado destacado.
Posteriormente tuvo dos presentaciones ante los siempre difíciles Fortaleza y Boyacá Chicó, encuentros que los sacó adelante con victorias. El primero se vivió con mucha tensión porque la racha negativa en casa este año era terrible. En el segundo con mayor tranquilidad se impuso después de que se comenzó perdiendo.
¿Pero cuáles son las virtudes y los aciertos de René Rosero?
– Primero no desbarató de plano lo que venía haciendo el técnico Jersson González, a quien, si bien no se le dieron los resultados, su trabajo no era negativo, especialmente como visitante.
– Rosero introdujo unas modificaciones posicionales para aprovechar las condiciones de sus jugadores, las cuales fueron atinadas.
– Ubicó de extremo por derecha a Israel Alba, papel que lo cumple a cabalidad haciendo sociedades con el lateral Santiago Gómez.
– En el juego ante Alianza apareció Cristian Arrieta en la mitad de la cancha, a veces como doble cinco al lado de Víctor Mejía cuando el equipo tenía el balón, mientras que como interior por izquierda cuando Pasto era atacado y en donde Diego Chávez se sumaba como interior por derecha.
– Me ha gustado la personalidad del técnico Rosero al respaldar y jugársela con Kevin Londoño, un jugador muy útil en la parte táctica, a quien le llovían las infundadas críticas.
No sé lo que vaya pasar de aquí en adelante con René Rosero, pero lo veo bien encaminado en el rol de entrenador. Seguramente al Pasto no le va alcanzar para clasificar, sin embargo, hay que sumar la mayor cantidad de puntos en este semestre y sembrar una base sólida para realizar una buena campaña en la segunda parte del año.