La esperada participación de la carroza ‘Contra Viento y Marea’, una creación magistral del artesano Edwin Fernando Ramos, en el Carnaval de Barranquilla se vio empañada por una serie de obstáculos que desataron el descontento entre los pastusos. Tras su éxito en el Carnaval de Negros y Blancos 2024, la obra fue invitada a la celebración en la capital atlanticense, pero al llegar, se enfrentó a complicaciones logísticas que impidieron su desfile en su totalidad.
Según versiones preliminares, el cableado en la carrera 44 de Barranquilla resultó ser un obstáculo insalvable para la imponente carroza, cuyas dimensiones colosales no lograron ajustarse al recorrido previsto. Ante esta situación, la obra tuvo que ser desmontada parcialmente, lo que generó descontento entre quienes admiraban su majestuosidad en Pasto.

Disgusto entre el público
El disgusto se intensificó al considerar que la esencia de la obra se vio comprometida al desfilar de manera incompleta, privando al público barranquillero de la experiencia completa que tanto impactó en el Carnaval de Negros y Blancos. Algunos especulan que la presencia de la figura del demonio en la carroza pudo haber influido en la resistencia generada en Barranquilla, aunque esta versión no ha sido confirmada oficialmente.
Dificultades logísticas Lo que es claro es que la participación de la carroza en el Carnaval de Barranquilla se habría concretado a través de acuerdos particulares, sin la participación activa de las instituciones que representan la festividad en Pasto. Este hecho, sumado a las dificultades logísticas, alimenta el malestar entre los pastusos, quienes esperan que la obra regrese intacta a su tierra nariñense después del revés sufrido en la costa colombiana.

