En medio del ajetreo diario y las tensiones que marcan la sociedad actual, la búsqueda de un estilo de vida saludable se ha erigido como una prioridad ineludible para muchos. En este contexto, la calistenia ha surgido como un regalo tanto para el cuerpo como para el alma, convirtiéndose en una tendencia imparable que ha cautivado a la ciudad de Pasto. Más allá de ser simplemente un deporte, la calistenia se ha arraigado como un estilo de vida cotidiano, ofreciendo una salida a aquellos que desean dejar atrás vicios y descubrir en la actividad física una senda hacia la mejora de sus condiciones de vida.
«Lo bueno de la calistenia es que se la practica desde los 4 años y también lo hacen las personas adultas, los invitamos al Parque Infantil a los entrenamientos, todos están invitados es totalmente gratis,» afirmó Deivy López, seguidor de esta disciplina y apasionado por compartir sus beneficios con la comunidad.
Acondicionamiento aeróbico
La calistenia, más que un simple conjunto de ejercicios, se erige como una filosofía que propone utilizar el propio peso corporal como herramienta para fortalecer la fuerza, flexibilidad, agilidad, equilibrio, coordinación y acondicionamiento aeróbico. Desde los más pequeños hasta los adultos mayores, la calistenia se adapta a todas las edades y niveles de condición física, convirtiéndose en una opción inclusiva para aquellos que buscan mejorar su bienestar.
Rutina diaria
A pesar de las dificultades que impone la vida moderna para encontrar tiempo dedicado a la actividad física, los expertos aseguran que la práctica de deportes como la calistenia no solo impacta positivamente en la rutina diaria, sino que también corrige los hábitos sedentarios que pueden afectar la salud en general. En la última década, esta disciplina ha ganado popularidad a nivel global, y Pasto ha sido testigo de una creciente comunidad de entusiastas que encuentran en las barras y el movimiento del cuerpo una forma de expresión y superación personal. En síntesis, la calistenia no se limita a ser un conjunto de ejercicios; es una invitación a dominar el control sobre la elevación y el movimiento del cuerpo en el espacio. En Pasto, la calistenia se presenta como más que un deporte; es una revolución que inspira a los jóvenes a dejar atrás sus problemas, adoptar hábitos de vida saludables y descubrir en la actividad física una senda hacia la superación personal.