Siempre al finalizar cada año, sacan a relucir las tales profecías de reconocidos videntes sobre lo que ocurrirá próximamente.
Por lo general, nunca de lo que publican ocurre. Por fortuna, ya que esas tales profecías siempre hablan de hechos catastróficos y malos que ocurrirán.
Ninguno de los tales videntes predijo la pandemia que nos azotó en el 2020, algo que jamás pensaríamos que ocurriría y que incluso nos encerró en nuestras casas durante muchos meses. Ahí se comprobó que esos supuestos adivinos solo dicen mentiras.
Ahora si vamos a las ‘profecías’ que dijeron ocurrirían en este año, las cuales no atinaron ninguna.
Según los expertos en los escritos de Nostradamus, en el 2023 se presentaría la renuncia del Papa Francisco y que su lugar sería ocupado por una persona muy oscura y peligrosa que causaría un escándalo. No ocurrió, menos mal.
Dijeron que ocurriría un suceso traumático lo que provocará una gran despoblación en muchos países, especialmente en Europa. Por fortuna, tampoco sucedió.
Señalaron que en un fragmento de una cuarteta de las profecías de Nostradamus, asegura que ‘una luz caería sobre Marte’ en el 2023 y que sería un evento de trascendencia mundial. Eso tampoco pasó, el hermoso planeta rojo sigue ahí tal cual como siempre.
“El vidente predijo para 2023 conflictos, inestabilidad y descontento social en el gran país del norte. Estados Unidos. Y que habrá un nuevo orden mundial, haciendo referencia a la unión de dos fuerzas, una masculina y la otra femenina, pero que su alianza durará poco”, dijeron los traductores de las profecías a finales del año pasado, pero igualmente fallaron.
El astrónomo y médico francés Michel de Notre- Dame, popularmente conocido como ‘Nostradamus’, es recordado todos los años por los apasionados investigadores de sus cuartetas, aquellos escritos donde dejó plasmadas sus sorprendentes profecías para el mundo moderno, algunas de las cuales dicen que si se han cumplido, pero a mi parecer, los tales traductores de esos escritos nunca atinan a nada, o será más bien que las mal interpretan.
Personalmente lo que no me gusta de las profecías de Nostradamus es que casi en su mayoría hablan de hechos negativos, de muerte, destrucción, desolación, así que por nuestro bien y el del mundo entero, esperemos que nada de eso ocurra y que el 2024 sea un año de grandes cosas para la humanidad, de mucha prosperidad y que todo lo bueno llene nuestras vidas.
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