En el mundo la mayoría de las empresas, tienen como base de operación una misión y una visión, en la que se define el para qué y el por qué de la actividad comercial que se realiza, siempre delimitado por cifras de ventas, ganancias y rentabilidad. Pero, ¿y si esto no es lo que realmente cuenta? y ¿si lo más importante es el amor que cada colaborador pone en lo que hace? y de esta manera las organizaciones encuentran un propósito común que beneficie a la sociedad, más allá de los resultados económicos.
Este modelo de gestión empresarial es conocido como “La dirección por misiones” que consiste en aumentar el nivel de conciencia y el impacto que tienen las organizaciones en la sociedad, es una evolución de la dirección por objetivos como la conocemos hasta hoy.
Bajo este precepto es evidente que el denominado “movimiento B-Corp” que está en plena expansión, y que apunta a fortalecer una nueva generación de organizaciones dispuestas a asumir el compromiso de procurar el bienestar de la sociedad y el medio ambiente como parte de su modelo de negocio, toma cada vez más fuerza en en nuestro país y la región. Y un caso puntual es Outsourcing, empresa colombiana que fue la primera compañía del sector de BPO y Contact Center en convertirse en una Sociedad de Beneficio e Interés Colectivo (BIC), con acreditación B Corp, que trabaja bajo estándares GRI, comprometida con la sostenibilidad y el impacto social como pilares centrales de su modelo de negocio.
En cifras globales, son más de 7.470 compañías en cerca de 92 países del mundo y que hacen parte de este movimiento de empresas con propósito que priorizan la sostenibilidad y el desarrollo social. Y cada vez son más las organizaciones que están llamadas a definir y gestionar el propósito para generar cambios significativos en su entorno y lograr un futuro mejor para las próximas generaciones. En Colombia son 1.500 empresas con propósito que están registradas, según datos del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo.
Cada vez se hace más evid ente que para tener éxito en el contexto global de los próximos años, ya no basta con centrarse únicamente en la productividad y rentabilidad del negocio. Las empresas del futuro deberán ser capaces de impactar en su entorno y en sus públicos de forma significativa, amplificando sus beneficios no solo económicos, sino también sociales y ambientales, para aportar al bienestar colectivo. Afirma Carlos Rey, Director de la Cátedra: Dirección por misiones y Gobierno Corporativo de la Universidad Internacional de Cataluña.
Outsourcing S.A.S. BIC, compañía pionera y fundadora de la industria de BPO y Contact Center en Colombia, que celebra 30 años innovando y liderando el sector desde el propósito superior de mejorar vidas, es el ejemplo de una empresa que no solamente definió un propósito superior, sino que entendió que su razón de ser no solamente se expresa por prestar servicios a sus clientes, sino que corresponde a servir a todas las personas que se involucran en esta gestión, desde una filosofía empresarial del cuidado y el impacto positivo hacia todos los grupos de interés.
En Colombia, las empresas con propósito, que desde su concepción generan valor compartido entre los aspectos sociales, ambientales y financieros, son claves en la transición hacia la sostenibilidad que ha venido realizando el país, a través de esfuerzos orientados a cumplir con los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas.