Más de una tercera parte de los 1.102 municipios y ciudades de Colombia enfrenta riesgo extremo y alto de que ocurran actos de violencia por parte de grupos armados ilegales que afecten las elecciones regionales del 29 de octubre, advirtió ayer la Defensoría del Pueblo.
Los colombianos irán a las urnas en un poco más de dos meses para elegir 1.102 alcaldes y 32 gobernadores, además de diputados, concejales y ediles en unas elecciones que los analistas consideran como un plebiscito para el Gobierno del presidente izquierdista Gustavo Petro, que en un año enfrenta bajos niveles de popularidad y críticas a su gestión.
Peligro en 399 municipios
El informe de la Defensoría del Pueblo reveló que 399 municipios se encuentran en riesgo extremo y alto, en tanto que 113 en 16 de los 32 departamentos del país enfrentan un peligro extremo con «muy alta probabilidad de ocurrencia de hechos de violencia en el marco del proceso electoral y con registros de acciones por parte de grupos armados al margen de la ley».
La alerta de la Defensoría, una entidad independiente que promueve y vigila la defensa de los derechos humanos en el país reveló que otros 286 municipios enfrentan riesgo alto.
«La situación es preocupante, llama especialmente la atención», dijo durante la presentación del informe el defensor del pueblo, Carlos Camargo. «Hay unos riesgos que son evidentes, es lo que se está viendo en los territorios».
Falta de control del Estado
El defensor alertó por la falta de control territorial y social del Estado, lo que facilita la presencia y actividades de grupos armados como las disidencias de las FARC, el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y bandas criminales como el Clan del Golfo que se enfrentan entre sí y con las Fuerzas Armadas por economías ilícitas como el narcotráfico y la minería ilegal.
Colombia enfrenta un violento conflicto desde hace seis décadas que ha dejado más de 450.000 muertos y millones de desplazados, pese a los esfuerzos de Petro por alcanzar una paz total.

