En Túquerres, Nariño, donde el Deportivo La Sabana se enfrenta al Semillas Tuluá FC en el estadio Alberto León Mantilla en un partido que podría definir el rumbo de ambos equipos en la Primera C del fútbol colombiano.
Después de sufrir una derrota en condición de visitante en el Valle del Cauca, el conjunto nariñense regresó a su tierra natal con la firme convicción de darle vuelta al marcador adverso de 1-0 en contra. Este enfrentamiento es el juego de vuelta de la segunda fase del torneo, y para La Sabana, es un todo o nada. Deben ganar sí o sí para seguir avanzando hacia la tercera ronda, mientras que un empate o una derrota significaría la despedida del campeonato.
Conscientes de la importancia del partido, el equipo local buscará hacerse fuerte en su propia cancha, apoyado por su ferviente hinchada. La remontada es el objetivo principal, y el respaldo de sus seguidores podría ser el impulso necesario para lograrlo y sellar su boleto a la siguiente fase del campeonato nacional.
Sin embargo, este partido no ha estado exento de polémica en lo que respecta a la logística. La noticia de que el árbitro del encuentro sería de procedencia nariñense ha generado comentarios y controversias, especialmente desde el lado rival y visitante. Algunos argumentan que en un partido tan crucial para definir a un equipo clasificado y a otro eliminado, debería designarse a un árbitro de otro departamento para garantizar la imparcialidad en el desarrollo del juego.
La tensión está en el aire y las expectativas están por las nubes en Túquerres, donde todo está listo para un enfrentamiento que promete emociones, incertidumbre y, sobre todo, un equipo que luchará hasta el final por mantener viva su esperanza de avanzar en la Primera C. El estadio Alberto León Mantilla será el epicentro de esta batalla deportiva que marcará el destino de Deportivo La Sabana y Semillas Tuluá FC en el torneo.