El terrible hecho de cada fin de semana en la ciudad de Pasto se registre por lo menos un accidente de tránsito a consecuencia del estado de embriaguez de los conductores, nos muestra que a pesar de los 25 muertos que se han registrado en la ciudad por esta situación en lo que va corrido del año, la gente no toma conciencia de las grandes tragedias que se han provocado por culpa de esta mortal irresponsabilidad.
Nos da bastante pena el que, en estos 5 primeros meses del año, el luto haya causado el más terrible dolor, en especial entre los padres de familia, puesto que lamentablemente han sido los jóvenes los que han aportado el mayor número de víctimas fatales en la capital nariñense.
Es así, como el fin de semana que acaba de pasar, no fue la excepción en esta oleada de accidentes ocasionados por el licor y se presentaron dos episodios de extrema gravedad, uno de los cuales cobró hasta el momento, el muerto número 25 en Pasto, con la colisión de un vehículo contra la glorieta de Chapal, hecho que, además, dejó 4 personas heridas de consideración.
Sí bien, son importantes los operativos por parte de las autoridades, para evitar esta clase de situaciones, en las que personas en alto grado de alicoramiento se colocan frente a un volante, nosotros entendemos perfectamente, que es difícil, sobre todo a avanzadas horas de la noche o la madrugada, poder realizar un eficaz control a quienes sin importarles su vida y las de los demás, deciden conducir en avanzado estado de embriaguez.
«El terrible hecho de cada fin de semana en la ciudad de Pasto se registre por lo menos un accidente de tránsito a consecuencia del estado de embriaguez de los conductores, nos muestra que a pesar de los 25 muertos que se han registrado en la ciudad por esta situación en lo que va corrido del año, la gente no toma conciencia de las grandes tragedias que se han provocado por culpa de esta mortal irresponsabilidad».
Por lo tanto, hoy nuestro llamado es para que se tenga muy en cuenta la cifra de 25 personas que de manera abrupta han perdido la vida hasta hoy 30 de mayo en la ciudad de Pasto, por culpa del licor. Sí, es difícil que las autoridades puedan controlar estos hechos, por lo que debemos ser nosotros mismos, quienes tomemos conciencia del riesgo mortal que representa ese acto irresponsable, que tantos hogares ha enlutado.
No queremos más muertos en accidentes de tránsito debido a la aberrante mezcla de licor y gasolina, una combinación letal que hoy se ha convertido en uno de los principales flagelos de Pasto.
Queremos también que todos y todas seamos responsables y sí, vemos que el conductor que nos acompaña en esa noche de diversión, esta pasado de copas, hablar con él y tratar de impedir a toda costa, que se coloque frente al volante, lo que seguramente podrá salvar muchas vidas, incluida la del conductor. Y, como en ese objetivo de salvar vidas, todo vale, por lo tanto, no está de más, si advertimos que alguien en situación de embriaguez se dispone a conducir, alertar a la autoridad más cercana, para que impida esta peligrosa situación, lo que podría evitar que ocurra una dolorosa tragedia.
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Tampoco queremos que, en la ciudad de Pasto, le empecemos a temer, como ocurre en estos instantes, a la llegada de los fines de semana, en los que se está volviendo una siniestra costumbre, la ocurrencia de estos accidentes, en la que el licor es el protagonista, con saldo de víctimas y heridos.
Esperamos que, en estos fines de semana, de esparcimiento y diversión, la sombra de la muerte, no siga al acecho en la ciudad de Pasto, por cuenta de los conductores borrachos. Nos parece que 25 muertos son suficientes para ser un poco más responsables y no jugar con nuestra vida y la de los demás.