Por: Tatiana Solarte Hoyos
El trastorno especifico de aprendizaje en la lectura tiene una alta incidencia en la población infantil. Siendo esta misma tan grande, es normal formular dos importantes preguntas respecto a su detección e intervención: ¿Cuáles son las señales que indican que el niño tiene problemas con la lectura? Y, en segundo lugar, una vez detectados, ¿Qué puedo hacer desde casa para facilitar su estudio? Estas dos preguntas pueden abordarse con sencillos indicadores y técnicas útiles para utilizar desde casa.
La lectura es el común denominador de todas las asignaturas en la etapa escolar, por ello es importante que estas habilidades puedan ser correctamente reforzadas para asegurar un aprendizaje óptimo, evitando de esta manera el tan temido fracaso escolar.
Es importante recordar que, ante cualquier duda, se puede acudir al equipo interdisciplinar interno del colegio o a centros clínicos especializados para poder profundizar más allá dentro de los indicadores que pueden generar un signo de alerta si el niño tiene problemas con la lectura. A continuación, se mencionarán algunas de estas alarmas:
Le fue difícil aprenderse el abecedario, comete errores continuos y pausas dentro de la lectura, la velocidad lectora (pese a entrenar) sigue siendo lenta, tiene errores de comprensión de textos y enunciados, evita leer en público, siendo consciente de su dificultad.
Otro aspecto importante son las técnicas de estudio útiles en casa, dentro de las cuales se pueden encontrar:
Utilizar colores: Utilizar al estudiar un único color, sea lápiz o lapicero, puede ser poco motivador y en especial, poco facilitador de la memoria visual y fotográfica. El hablar de colores, no se refiere subrayar todo el escrito con un único color y a menudo fosforescente, se hace referencia al uso de diferentes colores para subrayar conceptos clave según su importancia.
Usar esquemas o dibujos: Pese a estar comúnmente extendida la frase “más vale una imagen que mil palabras” se sigue estudiando con mucho texto escrito y poco uso de esquemas y dibujos. De ahí que resulte importante señalar que todo aquello que los niños no sean capaces de imaginarse y dibujar, tendrá muy pocas probabilidades de que se pueda llegar a entender y asimilar.
Emplear imágenes y videos: Ante cualquier duda, siempre se ha aconsejado acudir al diccionario. Pero en caso de niños con dificultades en la lectura, también puede resultar muy beneficioso resolver cualquier duda en internet, con ayuda de imágenes y videos para facilitar su comprensión y memorización.
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Entrenar en voz alta: la mejor manera de estudiar, después de realizar un breve resumen o esquema, es poder entrenarlo oral y conjuntamente.
Hacer redacciones finales cortas: No hay que olvidar que, pese al entrenamiento oral, es también muy importante un último entreno escrito dado que los exámenes acostumbran a ser escritos.
Aplicar estas técnicas de estudio en niños con dificultad lectora, favorecerá su aprendizaje y facilitará su potencial lector.