En su reciente visita a Tumaco, el señor Contralor General de la República, Carlos Hernán Rodríguez, nos entregó la alarmante información de que, en nuestro departamento de Nariño, hay 63 obras que nunca se terminaron, valoradas en 253 mil 505 millones de pesos.
Nos estamos refiriendo a los famosos elefantes blancos u obras inconclusas, cuyo monto asciende a $121.067 millones, cifras que, sin duda alguna, se constituyen en pruebas evidentes de corrupción, malos manejos y un irresponsable despilfarro de los dineros públicos.
El contralor exteriorizó su preocupación por esas cifras, a la vez que se dolió como nos dolemos nosotros, que en ese sentido uno de los sectores más duramente golpeados es el del sector salud, donde no se terminaron obras por $42.828 millones en detrimento de miles de personas. Se trata de IPS indígenas con asiento en Tumaco y Barbacoas y proyectos que a pesar de los grandes gastos que demandaron no tienen ninguna viabilidad como son los casos concretos de los hospitales de Ipiales y El Charco.
En torno a este poco alentador informe, tenemos que decir que la razón para que el señor contralor lo presentará en el puerto nariñense, tiene un motivo plenamente justificado, puesto que el 10 por ciento de la totalidad de los proyectos identificados por el ente investigador como Elefantes Blancos en nuestro departamento de Nariño, se localizan en Tumaco.
«Importante el reporte y la ayuda brindada por la Contraloría General de la República, en esta visita a Tumaco, por lo que nuestro llamado es para que los nariñenses atendamos el llamado que hizo el contralor para que ayuden a vigilar estos proyectos y con el respaldo de este ente de control, se logre evitar que, en aras de la corrupción, obras que la comunidad necesita con urgencia se transformen en los tristemente famosos, Elefantes Blancos.»
En ese sentido, nos produce indignación saber cómo a pesar de la inversión de 7.772 millones de pesos, el proyecto de viviendas, que tenía como finalidad reubicar a las familias en situación de alto riesgo de 7 veredas del puerto, se quedó a medio hacer y el dinero se esfumó como sucedió con otros 6 proyectos.
Por lo pronto, podemos decir que el Contralor General de la República, Carlos Hernán Rodríguez, nos entregó la mala noticia en torno a que los municipios de Pasto, ocupan el primer y segundo lugar, en lo relacionado con proyectos identificados como Elefantes Blancos y Proyectos Críticos por valor de $66.38 millones y $25.58 millones respectivamente.
Pero, afortunadamente también hay una buena noticia y es que a través de la estrategia denominada Compromiso Colombia, la Contraloría General de la Nación, por medio dee la Contraloría Delegada para la Participación Ciudadana, hizo el acompañamiento a los nariñenses en el papel de veedores de los emprendimientos y obras que se están realizando en estos instantes en varias zonas del departamento, precisamente para evitar que se conviertan en Elefantes Blancos.
Es así como nos complace saber que en estos instantes la Contraloría General de la República y sus diferentes dependencias, nos acompañan en obras de transcendental importancia para el departamento de Nariño, como lo es el seguimiento que se le hace a la terminación de la vía Junín-Barbacoas, un proyecto que ha insumido cantidades de años y enormes recursos. Sin embargo, en la actualidad, gracias al trabajo conjunto con las veedurías ciudadanas, la Gobernación de Nariño, liquidó los contratos anteriores e igualmente, suscribió contratos para resarcir los daños y perjuicios causados a los propietarios de previos aledaños y lo principal, es que se consiguieron los recursos necesarios para la terminación y entrega de esta obra que tanto ha dado que hablar a través del tiempo.
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Importante el reporte y la ayuda brindada por la Contraloría General de la República, en esta visita a Tumaco, por lo que nuestro llamado es para que los nariñenses atendamos el llamado que hizo el contralor para que ayuden a vigilar estos proyectos y con el respaldo de este ente de control, se logre evitar que, en aras de la corrupción, obras que la comunidad necesita con urgencia se transformen en los tristemente famosos, Elefantes Blancos.