Enviado Especial: Juan David Galviz.
Mucho se habla en la ciudad de Mocoa sobre las obras de reconstrucción que se convirtieron en una utopía para aquellos que ya perdieron la fe de tener su casa propia luego de la catástrofe que sucedió hoy hace 6 años atrás. Los rostros de desesperanza se volvieron muy comunes entre la comunidad que visita Sauces II de vez en cuando y terminan viendo solamente el material de construcción que yace en donde serían construidas sus viviendas, obra a paso lento.
Ante la necesidad de respuestas a tantos interrogantes y poder verificar como van las obras de reconstrucción de Mocoa, DIARIO DEL SUR llegó hasta Sauces II y conoció de primera mano cómo va este proceso del cual muchos aún siguen aferrados, mientras que otros ya ven lejano. Y es que, en medio de las inclemencias del clima, el barro, el material de construcción en el camino, las obras avanzan a paso muy lento y las promesas de entregar viviendas desde el año pasado se quedaron en el olvido.

¿Cómo va el proceso?
Lo primero que pudo conocer esta casa periodística es que las obras retomaron su curso hace unos días atrás luego de una inyección económica que se dio desde la Unidad Nacional para la Gestión de Riesgo de Desastre, Ungrd, lo anterior teniendo en cuenta que este proceso había sufrido una para por temas económicos y porque el anterior consorcio no habría tenido la capacidad financiera para responder por sus obligaciones contractuales con los obreros.
Pero el tema vas más allá de esta para, lo anterior teniendo en cuenta que el contratista siempre ha presentado diversas dificultades a lo largo de los últimos años para cumplir en el tema salarial. Esta es una verdad a voces en medio de las calles de Mocoa en donde muchos mencionan que no les pagan por su trabajo en Sauces II, razón por lo cual la obra ha sufrido muchos retrasos. Con base en lo anterior quedan algunas dudas sobre el papel que estaría jugando la Ungrd en este caso para evitar incumplimientos que frenen en seco la obra.
Casas con averías
Sobre el tema de las viviendas, es cierto que ya se encuentran algunas de pie aparentemente listas para ser habitadas, pero mucho se habla de que esas 12 casas, que ya están pintadas, no tendrían las condiciones de infraestructura para ser habitadas. Según fuentes consultadas por DIARIO DEL SUR, estas edificaciones han presentado grietas y daños en su infraestructura. Así lo pudo evidenciar esta casa periodística cuando ingresó a algunas locaciones y notó algunas fallas en su infraestructura, ratificando así aquella versión preliminar que señala que la interventoría no estaría aceptando estas obras por fallas en su construcción.
Por otra parte, en el momento que DIARIO DEL SUR ingresó a Sauces II pudo conocer que se vinculó a un nuevo contratista el cual asumiría este proceso y aceleraría las obras para entregar algunas viviendas en los próximos meses. Es cierto que, por ahora, hay temas que solucionar como el acueducto, la instalación de los servicios básicos en las 12 viviendas que supuestamente están listas, entre otros aspectos.
“La obra está quieta”
La integrante de la veeduría Mocoa 2020, Rosalbina De la Cruz, le dijo a DIARIO DEL SUR que se cumplieron 6 años de la tragedia y desde hace dos años vienen solicitando que se construyan estas edificaciones, pero han sufrido contratiempos con el consorcio, la Ungrd, entre otros.
“Esta obra desde octubre esta quieta. Nos contaron que el consorcio había recibido dinero, pero no hay trabajadores. Nos dijeron que el retraso se dio por el cambio de Gobierno con la llegada de Gustavo Petro porque había actualizaciones en proyectos. La Ungrd es la total responsable de estos retrasos. No he perdido aún la esperanza, estamos luchando por las casas de las 909 familias”, comentó Rosalbina De la Cruz.
¿Pañitos de agua tibia?
El papel de la Ungrd en este problema ha sido objeto de críticas ya que se menciona que las veedurías han llegado hasta Bogotá para hablar con el director de la Ungrd, Javier Pava, quien se dice que brilla por su ausencia en este caso y no ha intervenido a fondo en estos retrasos. El que se puso al frente de la situación fue el subdirector de la Ungrd, Oscar Goyeneche quien anunció un incremento en el subsidio de arrendamiento que reciben los damnificados cada mes, pero temas de fondo no han sido intervenidos por la Ungrd.
El anterior anuncio lo dio en medio de las incesantes protestas de las veedurías quienes exigen la presencia del presidente Gustavo Petro y Javier Pava en Mocoa. ¿Pañitos de agua tibia?, el lector podrá sacar sus conclusiones. No obstante, en el Congreso el representante a la Cámara, Andrés Cancimance, denunció que dicho subsidio no ha llegado a los bolsillos de los damnificados desde el año pasado.
Sobre estas situaciones, DIARIO DEL SUR le solicitó personalmente una entrevista al director de la Ungrd, Javier Pava, quien no dio respuesta a los cuestionamientos de esta casa editorial señalando que no tenía claridad sobre muchos datos.
¿Qué pasó con los jarillones?
Otro punto aparte merece el tema de las obras de mitigación. Hace unas semanas atrás las fuertes lluvias en el departamento colapsaron los muros de estabilización de concreto que se encuentran a orillas del río Mulato y Sangoyaco. Estas edificaciones de concretó sufrieron rupturas en sus bases, razón por la cual quedaron muchas dudas sobre la calidad de los jarillones en caso de una emergencia de grandes latitudes por las precipitaciones.
“Desde un principio nos opusimos a las obras de mitigación desde el 2019. En ese año la gobernadora Sorrel Aroca junto a José Castro salían de sus funciones y le adjudicaron este proyecto a una de las instituciones más corruptas como lo es la Ungrd desde gobiernos anteriores. Fueron 250 mil millones de pesos los cuales iban para esas obras de mitigación”, comentó Ramón Apráez.
Según denunció el veedor, los jarillones fueron mal diseñados para los ríos de piedemonte debido a que a el ancho de la base de los muros de concreto por 60 metros son de arena y piedra los cuales no tendrían ninguna base de concreto que soporte la velocidad del río y el material que este transporta.
Foto 2. Las obras de mitigación sufrieron rupturas en sus bases luego de las fuertes lluvias de las últimas semanas.
¿Y la plaza de mercado?
El tema de la plaza de mercado es el más oscuro de todas las obras de reconstrucción. Esta obra se habría proyectado sin planificación y con una inversión de 12 mil millones de pesos los cuales aparentemente no tuvieron éxito debido a que por el sector iba a pasar una vía nacional y no tenían las condiciones para ser construida.
Con base en lo anterior el proceso se habría dilatado y no se pudo construir la plaza de mercado por requerimientos ambientales de Corpoamazonia. Todo esto generó que la plaza de mercado no se pudiera construir y hoy es un caso inconcluso en medio de la reconstrucción de Mocoa.
“Nunca hicieron caso a los usuarios que utilizan en la plaza de mercado. Debería haberse proyectado como una gran plaza de mercado, un centro de acopio de tres hectáreas, idea que no se logró. La proyectaron a nivel nacional con el afán de invertir 12 mil millones de pesos. Esto no se dio. No hicieron caso a las 600 familias de la plaza de mercado”, le dijo a DIARIO DEL SUR el coordinador de las veedurías, Ramón Apráez.
Es una vergüenza

El alcalde de Mocoa, John Jairo Imbachí, le dijo a DIARIO DEL SUR que es evidente los retrasos que tienen las obras de reconstrucción en Mocoa y reiteró el concepto de algunos funcionarios del Gobierno de que estas obras son una vergüenza por no haberlas culminado en los tiempos estipulados.
“Queremos darle las gracias al Gobierno por obras como el megacolegio y el plan maestro de alcantarillado los cuales ya son una realidad. Obras como las viviendas han sido incumplidas. Como Alcaldía hemos puesto en conocimiento a los entes de control las denuncias correspondientes para que se construyan rápidamente las viviendas”, comentó John Jairo Imbachí.
Asimismo, Imbachí López señaló que es importante que los procesos avancen y los responsables de los retrasos paguen por los daños psicológicos a los damnificados. “A veces nos preocupa porque dicen hallazgos en la plaza del mercado y señalan a la Alcaldía, pero esto es de responsabilidad del Gobierno. Todo nuestro apoyo a los damnificados. Licencias, permisos y revisiones siempre serán prioritarias para esta administración”, comentó Imbachí López.
“La segunda tragedia es la reconstrucción”
El contralor Hernán Rodríguez indicó que es muy preocupante que no se hayan iniciado las obras correspondientes en la zona alta de los ríos Mulato y Sangoyaco y la quebrada Taruca pese al riesgo latente anunciando por los organismos de control hace un año.
“Las obras del megacolegio no han sido culminadas, tienen un retraso de 3 años con un costo superior al plan de acción específico. Si se aplicaría diligencias sobre el tema podríamos decir que acabarán las obras en el 2025 y teniendo en cuenta que el contrato está en ejecución. El centro penitenciario iba a terminar el 30 de marzo del 2022, pero no tiene estudios, ni diseño, ni lote, y tiene un retraso de 5 años. La Contraloría impone proceso de revisión fiscal por 21 mil millones de pesos por irregularidades en la construcción del acueducto de Mocoa”, comentó Rodríguez.
Asimismo, el contralo indicó que 909 familias han sido afectadas por estos retrasos en Sauces II ya que solo se ejecutó el 5% de la obra en un contrato suscrito entre la Ungrd y el Consorcio Mocoa 2019.
Un rayo de luz en medio de la oscuridad

La construcción del megacolegio de Mocoa es el único proceso rescatable dentro de la reconstrucción de Mocoa. Este establecimiento educativo es ad portas de ser entregado y cuenta en su infraestructura con aulas de clases en buenas condiciones junto a laboratorios y espacios abiertos óptimos para los estudiantes.
Al megacolegio le restan detalles para ser entregados, entre ellos el tema de tubería, acueducto y algunos por menores que se esperan subsanar en las siguientes semanas por parte de los responsables del tema.
El representante de la firma encargada de la construcción del megacolegio, Juan Fernández precisó que el establecimiento cuenta con 12 aulas para bachillerato, 10 para primaria y varias aulas para preescolar. Sumado a esto, el megacolegio cuenta con laboratorio de física y química junto a una biblioteca.
“Contamos con un comedor, una sala de profesores y la enfermería. Tenemos un polideportivo y una zona especial de juegos para los estudiantes de preescolar. El tema de mobiliario y dotación ya está en un 100%”, comentó Juan Fernández.
Hoy audiencia pública
Con motivo de la conmemoración de los 6 años de esta tragedia, se espera que en la ciudad de Mocoa se realice una audiencia pública con representantes del Congreso para evaluar qué pasó con la reconstrucción de Mocoa luego de 72 meses.
Uno de los garantes en esta audiencia pública y que le puso la lupa a este tema es el representante a la Cámara, Andrés Cancimance, quien precisó que se exigirá, dentro de la audiencia pública, fechas concretas para la entrega de las viviendas de Sauces II, obra que es la insignia dentro del proceso de reconstrucción.
“A la reconstrucción de Mocoa no le vamos a quitar los ojos de encima; exigiremos avances, transparencia y avanzaremos en el seguimiento al lado de las veedurías ciudadanas. Invitados todos y todas a conocer el nuevo cronograma de trabajo”, comentó Cancimance.

