Malas horas vivimos en estos momentos en Nariño, a consecuencia de la intensidad de las lluvias que nos siguen azotando con fuerza inusitada, causando múltiples afectaciones no solo en Pasto, sino en vastas zonas del departamento.
La tragedia ocurrida en el corregimiento de El Encano, zona rural de la capital, donde una avalancha provocó la muerte de 4 personas, así como la destrucción de casi un centenar de viviendas y el cierre de la vía Panamericana a consecuencia de un deslizamiento de 5 mil metros cúbicos de tierra, lo que en estos momentos tiene a Nariño aislado con el resto del país, obligó a las autoridades locales a declarar la emergencia pública, ante las difíciles situaciones que se afrontan en esta zona sur del país.
En ese sentido, las cifras son bastante preocupantes, puesto que las lluvias, ya superaron el promedio histórico, lo que ha dejado al departamento sin capacidad de reacción, lo que no dejó otro camino que declarar la calamidad pública. De esta manera, se tiene que, en lo corrido del año, se han presentado en el departamento de Nariño, debido a las fuertes precipitaciones, 120 episodios, por los cuales 41 municipios enfrentan en estos instantes, graves afectaciones, además de que con las cuatro víctimas fatales que se registraron en El Cano, ya son 7 las personas que han perdido la vida en la región por culpa de los acontecimientos provocados por las lluvias.
Se trata de deslizamientos, derrumbes, inundaciones, desbordamiento de ríos, entre otras situaciones delicadas, que, de acuerdo con las informaciones entregadas por las autoridades locales, impactan a 7.231 familias, más de 21 mil personas en diversas zonas del departamento.
Además del elevado número de damnificados, las lluvias también causan grandes daños en los cultivos en por lo menos, 5 municipios e igualmente 168 puntos críticos en las vías y una decena de acueductos dañados en detrimento de diversos sectores poblacionales.
En lo concerniente a las carreteras, el cierre actual de la vía Panamericana, causa en el departamento, escasez de combustible, medicamentos y otros productos, lo que ya comienza a inquietar a la ciudadanía, ante los más recientes anuncios que se han hecho, respecto a que la posibilidad de dar paso en la vía Panamericana se podría prolongar varios días más, lo que contribuiría a agravar la delicada situación que vive el departamento.
Por culpa de la temporada de lluvias, los nariñenses nos enfrentamos nuevamente a una situación difícil, aislados del resto de Colombia, lo que ya se refleja en la carencia de gasolina y gas, elementos que ya se comenzaron a racionar en la ciudad de Pasto y en varios municipios del departamento, con los consiguientes perjuicios que ello ocasiona a las comunidades.
Es difícil luchar contra los elementos y esto lo estamos viendo, en el actual panorama que presenta hoy nuestro Departamento de Nariño, “con el agua al cuello”, como expresa la frase coloquial. Por ello, el llamado no puede ser otro que, el de la más total prevención, para evitar que las lluvias sigan causándonos grandes daños.
El prevenir tiene que ser una prioridad de los alcaldes de los 64 municipios, máxime cuando el Ideam y experimentados meteorólogos como Max Enriquez, insisten en anunciar que lo peor de la temporada de lluvias todavía no ha pasado en Nariño y nos esperan unas fuertes precipitaciones en el transcurso de los próximos días.
Por ello, por ahora no tenemos otra alternativa que acatar al pie de la letra, las recomendaciones de las autoridades en materia de prevención y permanecer alejados de las zonas de alto riesgo, ya sea por el peligro de deslizamientos o inundaciones.

